Es indudable, el vídeo marketing nos proporciona mayores posibilidades de conectar con la audiencia. El contenido visual manda en la era digital y el vídeo encabeza el ranking en cuanto a su capacidad para generar engagement. Su versatilidad nos permite crear contenidos audiovisuales adaptados a las necesidades de casi cualquier negocio. Con una buena estrategia de contenidos, el aumento de la visibilidad, interacción y tráfico web está prácticamente asegurado. Si pretendemos adaptarnos a los continuos cambios tecnológicos en la era de la transformación digital, el vídeo marketing no puede faltar en nuestras estrategias de contenidos si queremos seguir siendo competitivos.
El poder del vídeo marketing
El vídeo marketing hace mucho tiempo que dejó de ser una tendencia. A día de hoy, es el contenido más consumido en Internet y aporta numerosas ventajas a aquellos negocios que quieran destacar frente a su competencia. Como hemos comentado, el vídeo es capaz de generar un mayor engagement gracias a su capacidad para transmitir mensajes con una mayor eficiencia. Debido a esta circunstancia, se produce una mayor interacción y aumenta el tiempo de permanencia en las cuentas sociales, blogs y sitios webs de los negocios con presencia en Internet.
Una buena estrategia de vídeo marketing no es necesariamente costosa y aporta otros beneficios, además de los ya mencionados. Entre los más importantes se encuentra el posicionamiento, ya que los sitios webs que incorporan contenidos de vídeos son bien vistos por los buscadores. Esto significa, mayor visibilidad y a su vez supone la posibilidad de llegar a más usuarios. De esta forma, obtenemos una ventaja más a la hora de encontrar y conectar con nuestra audiencia objetiva.
Contenidos de vídeo para conectar con la audiencia
El primer paso que deberíamos dar, consiste en crear contenidos de vídeo que reflejen los valores de nuestra marca. En este sentido, el vídeo es capaz de transmitir haciendo aflorar todo tipo de sensaciones y emociones positivas. En un corto espacio de tiempo, un vídeo corporativo o de imagen de marca es capaz de captar la atención del usuario e influir en su decisión a la hora de tenernos en cuenta para futuras compras.
El vídeo en directo se impone en la era digital. Tenemos varias posibilidades, desde emitir contenidos en vídeo para mostrar el día a día de nuestro negocio como emisiones donde el usuario puede interactuar realizando comentarios, consultas, etc. Desde que esta tendencia se instauró dentro de las estrategias de vídeo marketing, su interés sigue creciendo. Es una apuesta segura de cara a conectar con la audiencia y aumentar el engagement.
No podemos dejar de hablar de otros tipos de contenidos de vídeo como los tutoriales o los basados en testimonios reales. Ambos, aunque totalmente distintos, aportan confianza al consumidor. En el caso de los tutoriales, la exposición del interlocutor de una empresa de forma periódica permitirá una conexión cercana con el consumidor. Si hablamos de los vídeos basados en experiencias reales de un usuario con los productos y servicios de una marca, la confianza que aportan puede ser decisiva en la decisión final de compra de otros consumidores.
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