El Marketing de Contenidos es una estrategia que se ha consolidado con la cada vez mayor familiariedad con el mundo online. De ahí que muchas empresas hayan apostado por estas acciones y sus efectos positivos, como son generar credibilidad y confianza en los consumidores y mayor contacto con los potenciales clientes. Hoy os vamos a desvelar algunas tácticas para superar el bloqueo si en un momento dado estamos generando contenidos y nos quedamos sin ideas.
Dedicarle más tiempo
Cuando se arranca una estrategia de contenidos y se tiene claros cuáles son los objetivos, el tono y los temas que se van a tratar, lo normal es que durante un tiempo se creen ideas y escriban contenidos sin ningún problema. Pero tiempo después, puede comenzar a sentirse la sensación de que ya no hay temas que tratar. Pero es mejor enfocarlo de otra manera: hay muchas formas de informar, entretener o mostrar los productos y servicios de la empresa; solo es cuestión de tiempo dar con ello.
Por eso, debemos dedicar más tiempo a analizar el contenido que ya tenemos y cómo darle una vuelta; leer más sobre el sector y también sobre otros sectores (más importante que los títulos son las ideas); o para leer comentarios y conocer las necesidades de los usuarios.
Aprovecha tu propio contenido
A veces, los contenidos que escribimos tan solo son una forma de tratar un tema, pero hay muchas. Por eso, también debemos pensar en los artículos que mejor nos hayan funcionado o sobre todo que mejor cumplen el objetivo de la empresa para reciclarlos y darles una nueva salida. Convertir esos datos en un gráfico, en un artículo en profundidad o en clave de humor pueden ser algunas ideas.
Invertir más
Aunque parezca que pueda no estar relacionado, invertir más en los contenidos que estamos generando puede ayudarnos a sacar mayor provecho de las publicaciones que hacemos y tener nuevas ideas a la hora de crear nuevas propuestas. Equipo nuevo, formas diferentes de presentar el contenido que ha funcionado ya de otras maneras o herramientas que nos ayuden pueden ser algunas soluciones.
Trabaja más los contenidos
A veces, los contenidos que más fácilmente se elaboran son aquellos que escribimos en primer lugar. Por eso, si llegamos a un punto que no tenemos nuevas ideas para publicaciones, podemos pensar en hacer artículos en profundidad. Así, podemos pensar en recopilación sobre textos anteriores, entrevistas, casos de éxito, repasos a periodos de tiempo o comparaciones con épocas de antaño.
Colabora
En ocasiones, se necesita aire fresco en tu publicación. Por eso, puedes invitar a firmas de terceros a participar en ella o hacer un post colaborativo con fragmentos escritos por otros expertos en la materia.