¿Sabes qué es una estrategia omnicanal? Si no lo sabes, seguramente es porque no la has puesto en marcha en tu negocio y esto significa que estás perdiendo una gran oportunidad para captar la atención de tus clientes potenciales. Con la llegada de la era digital, no hay prácticamente venta sin consumo previo de información. Esta debe ser fiable y estar disponible en aquellos canales y plataformas demandados por el consumidor. Es en este punto donde entra en juego una estrategia omnicanal. Vamos a darte las claves para que sepas cómo crearla y puedas sacarle el máximo partido a tu negocio, a través de los medios online.
Qué es una estrategia omnicanal
Para comprender qué es una estrategia omnicanal, en primer lugar debemos ponernos en el lugar del consumidor. El objetivo es mejorar al máximo su experiencia de usuario con nuestra marca comercial. Para ello, debemos dar solución a una serie de cuestiones como: ¿qué garantías tienen nuestros productos y servicios? ¿qué piensan los usuarios de nuestra marca? ¿somos una marca competitiva? ¿proporcionamos información de calidad? ¿ofrecemos contenidos en las plataformas adecuadas?, etc.
Debemos hacernos estas preguntas, porque son las que un usuario se va a plantear antes de realizar cualquier adquisición. Como comentábamos al principio, los medios digitales nos permiten resolver todas estas cuestiones y otras de igual relevancia. Satisfacer sus necesidades en este sentido, nos permite captar la atención de un futuro consumidor y aumentar las posibilidades de convertirlo en cliente fidelizado.
Cómo crear una estrategia omnicanal
Internet nos proporciona la oportunidad de acceder a la información 24 horas al día, los 7 días de la semana. No sólo eso, muchas plataformas de venta directa permiten la adquisición de productos y servicios, sin depender de horarios ni disponibilidad de stock en tienda física. Ya sea que nuestro sitio web sea nuestro escaparate online corporativo o una tienda online, debemos ser conscientes de la importancia de mantener actualizados los contenidos (informativos, promocionales, galería de productos, etc.)
Pero no podemos depender únicamente de nuestras plataformas (sitio web, blog corporativo, etc.) Una gran parte de los usuarios, no llegará de forma directa a ellas a través del buscador. Son muchos los consumidores que acceden al sitio web de una marca, tras haber consumido algún tipo de información en diversas plataformas (redes sociales, correo electrónico, directorios empresariales, etc.) En este sentido, es preciso coordinar todas las plataformas donde tengamos presencia (propias o de terceros), con el fin de crear una experiencia de usuario satisfactoria.
Hoy día, un usuario adquiere información en una red social y desea saber más explorando el sitio web de marca o contactando directamente por Whatsapp, chats, teléfono, etc. Debemos estar preparados para dar fluidez al proceso de compra y hacer avanzar al usuario para culminar con éxito el proceso de compra.
Por otro lado, debemos contar con las herramientas digitales adecuadas, capaces no solo de ofrecer información eficaz en el momento y lugar adecuado, también para agilizar y facilitar procesos o resolver incidencias, en caso que sea necesario. Nos referimos a la flexibilización en los métodos de pago, simplificación de formularios de registro o compra, agilización de sistemas de envío o servicios de atención al cliente eficaces, que resuelvan de manera efectiva cualquier problema tras la adquisición de un producto o servicio.
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