A la hora de elaborar un plan de marketing digital, que resulte efectivo para los intereses de nuestra empresa, debemos tener en cuenta una serie de factores y variables que intervendrán de forma directa en el resultado de nuestra estrategia. Es importante prestar atención a cada uno de los procesos para alcanzar los objetivos previstos, entendiendo de forma clara cómo hemos alcanzado el éxito o en qué punto debemos realizar cambios para mejorar el rendimiento.
Proceso de análisis de mercado
El primer paso para dar forma a nuestro plan de marketing digital es llevar a cabo un análisis en el que se incluirán diferentes variables:
Análisis de mercado. Estudiaremos las posibilidades que puede ofrecernos el mercado en el que nos movemos. Para ello valoraremos tanto su situación, necesidades, margen y la competencia que encontraremos en el sector.
Una vez conocemos el mercado, averiguaremos cuál es nuestro público objetivo y cómo podemos llegar a él. Por último, si somos una empresa activa, determinaremos nuestra posición en dicho mercado, a través de un análisis interno y externo de nuestros productos o servicios y de las oportunidades que se nos pueden presentar definiendo una buena estrategia.
Objetivos
Para definir los objetivos podemos emplear el método SMART. Este método nos permite averiguar si nuestros objetivos son factibles ya que estos deben ser:
- Específicos: Deben ser objetivos, concretos y reales.
- Medibles: Nos deben permitir averiguar el progreso de nuestras acciones cuantitativamente.
- Alcanzables: Ponernos metas inalcanzables harán que se frustre cada plan de marketing que llevemos a cabo.
- Realistas: En relación a objetivos alcanzables, debemos saber si los objetivos marcados se ajustan a la realidad del mercado.
- Tiempo concreto: Los objetivos deben tener un plazo concreto para su consecución.
Estrategias
Es el momento de plantearnos cómo vamos a alcanzar los objetivos establecidos, en base a una serie de criterios englobados bajo las siglas DAFO. Se trata de averiguar nuestras debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades. Analizando estos criterios tomaremos decisiones que nos permitirán averiguar mucho más sobre nuestra marca, productos, servicios, equipo de trabajo, competencia y posibilidades que nos ofrece el mercado.
Tácticas
La primera táctica que nos plantearemos será llegar a la audiencia objetiva para nuestra empresa. A continuación, actuaremos para influir sobre ella para animarlos a adquirir nuestros productos o servicios. Una vez hemos alcanzado nuestro objetivo trataremos de retenerla, ampliando el ciclo de vida del cliente y obtener así el máximo rendimiento posible.
En este punto, emplearemos todas las herramientas que estén a nuestro alcance para seguir desarrollando nuestro plan de marketing digital (Contenidos, Email Marketing, Social Media, publicidad de pago, etc.), prestando atención en que la experiencia de cliente sea excepcional y ganando su confianza para fidelizarlo, convirtiéndolo en prescriptor de nuestra marca.
Análisis de estrategias
El último paso de este laborioso proceso consiste en analizar nuestras estrategias para medir su rendimiento y efectividad. En este caso, el uso de Kpis (Indicadores de rendimiento) será de gran ayuda para valorar de forma correcta si nuestro plan de marketing digital ha sido realmente efectivo, de cara a alcanzar el éxito en nuestra empresa.
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